Qué
mejor que elaborar un delicioso cheesecake de maracuyá para sorprender a tus
invitados o a tu familia. También es una excelente opción como pastel de
cumpleaños o simplemente como un regalo para cualquier ocasión.
Como
todo postre de alta cocina, este requiere de tres procesos indispensables:
elaborar la base, preparar el relleno y terminar con la decoración.
Ingredientes
- Base
100 gr. de mantequilla sin sal
6 paquetes de galleta vainilla molida
(Tentación)
- Relleno
2 paquetes de queso crema (Philladelphia)
250 gr. de crema de leche (Bazo Velarde)
1 lata de leche condensada (Nestlé)
4 hojas de colapíz
2 tazas de agua
1 cdta. de esencia de vainilla
- Decoración
Pulpa de maracuyá (semillas)
1 vaso de concentrado de maracuyá
1 cucharada de colapíz en polvo
Preparación
Para
la base, muele las galletas con un procesador y vuelca todo el contenido en un
recipiente. Luego agrega la mantequilla a temperatura ambiente y meźclalo todo
con un tenedor o si prefieres con la mano hasta que se forme una masa compacta.
Después,
en un molde desmontable, coloca la base de galletas que debe medir un
centímetro aproximadamente. Déjalo congelar por unos 30 minutos.
En
otro recipiente, bate el queso crema hasta que tenga una consistencia pastosa,
luego agrégale la leche condensada y compáctalo. Aparte, bate la crema de leche
hasta que doble su tamaño (empieza a formar picos y el tenedor se mantiene de
pie en el centro).
Cuando
alcance el punto, incorpóralo a la mezcla del queso en forma envolvente. Échale
la esencia de vainilla y listo.
Retira
la base de la refrigeradora y colóca la mezcla en el molde. Congela una vez más
el postre pero por dos o tres horas.
Finalmente,
antes de servir, coloca una buena cantidad de la salsa de maracuyá con una
cuchara tratando de que las semillas se luzcan en la superficie y déjalo
enfriar hasta cuajar.
Puedes
servirlo acompañado de salsa de chocolate, cerezas y hojas de menta.
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